Todos los días, todos hacemos un recorrido para llegar a nuestro destino (casa-trabajo/universidad-casa), cada persona tiene un rumbo, lo que no sabemos es que cada vez que vamos para algún lugar especifico pasan muchas cosas a nuestro alrededor y por estar solo pendientes de lo que tenemos que hacer no aprovechamos las cosas que nos rodean y dejamos pasar la vida así como así, sin pensar que vida solo es una y si no la aprovechamos, no hay momento para arrepentirnos.
El paseo en Circular me hizo reflexionar sobre que tan ciega estoy del entorno que me rodea, de lo que pasa en el exterior y no solo de lo que me pasa a mi y en mi casa; me hizo saber que la vida es como uno la quiera ver, si desde el punto de vista de que hay mucha gente pasando hambre o si por el contrario hay gente que quiere ganarse la vida honestamente; criticando las paredes como están de rayadas, o por el contrario ver que cada persona quiso expresar algo y le hizo un regalo a la ciudad plasmando su arte; criticando la forma de vestir de las personas, o por el contrario pensar en que cada uno tiene su estilo y forma de expresar sus sentimientos. Esto me hizo analizar que la vida hay que tomarla de forma positiva y ver el lado bueno de todas la cosas, porque cada cual es feliz si quiere serlo, es exitoso si lucha por serlo y cumple sus sueños si sueña.
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