
Mi escena preferida fue la ocurrida en París la parte en que el taxista monta una mujer ciega en el carro y al taxista, a pesar de lo serio que era le llama mucho la atención la forma como hacía esta persona para desenvolverse en su vida, hasta el punto que cuando la deja por seguir pendiente de ella termina chocándose. Esta escena es muy buena porque muestra como una persona con todos sus sentidos termina chocándose y la persona que tenía la discapacidad continua con su vida común y corriente.
Para finalizar la enseñanza que me deja esta película es que debemos respetar mucho el trabajo de los taxistas debido a que son personas que mientras uno ya se encuentra acostado en su cama, ellos continua con toda la cantidad de peligros que tiene la noche trabajando y transportando todo tipo de personas.
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